Pretende resolver los problemas del tráfico en las ciudades. Este coche ecológico tan curioso se llama Monomobile, una combinación de las palabras inglesas “Monorail” y “Automobile”. Lo han desarrollado en las Universidades de Cincinnati y Texas y es un coche eléctrico que combina el asfalto con un sistema único de vías de ferrocarril. Todo, para ahorrar energía.
En el proyecto han colaborado muchas compañías, aunque lo cerebros pensantes de todo son dos: Jay Andress y Andy Webster promotores de The MonoMobile Company de Cincinati. A pesar de eso, todos han puesto su granito de arena en cada parte necesaria, con lo que al menos, han conseguido construir el prototipo del coche.
El caso es que el vehículo, que es eléctrico, podría usarse de forma habitual para recorrer distancias cortas dentro de una misma ciudad. Ahora bien, la novedad llega a la hora de desplazarse de una ciudad a otra. Para este fin, los coches se incorporarían en un monorraíl único y especialmente construido para ellos, que les haría recorrer la distancia deseada a una velocidad máxima de 200 km/h, que no es poco.
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