No se vosotros, pero personalmente a mí no me gusta que cualquier persona pudiera conocer mi dirección de correo electrónico, al menos la personal, la que uso para mis fines privados. Pero imaginemos que somos usuarios corrientes, que estamos poco habituados a navegar por internet, y que para nosotros es un mundo.
¿Qué podemos hacer para ocultar nuestra dirección de correo real? Conocemos un nuevo redireccionador de correos electrónicos ideal para lo que buscamos: Akapost.
Akapost nos permite registrarnos, indicando en nuestro registro nuestra nueva id y la dirección de correo electrónico con la que queremos trabajar. Y entonces, una vez vayamos a enviar mensajes electrónicos a nuestros destinatarios, a sus direcciones les añadiremos al final .akapost.com.
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